viernes, 12 de diciembre de 2008

Dulce miel...


Continuamos hablando de las propiedades de la miel: ¿Sabe usted que comer miel diariamente, en lugar de los azúcares industrializados, ayuda a vivir mejor?: facilita la digestión y la regeneración de la sangre, fortalece los huesos, protege los tejidos y evita los trastornos circulatorios y cardíacos. En ayunas, la miel es excelente para curar úlceras gástricas e intestinales; aplicada en las picaduras de insectos e hinchazones causadas por golpes, alivia todo malestar: tomada con leche tibia es benéfica en casos de bronquitis.
Entre los cantantes de ópera es común el uso de un compuesto de miel, glicerina y limón, para suavizar las cuerdas bucales y evitar enfriamientos.
Es un delicado reconstituyente para los convalecientes y creador de nuevas energías; fortalece el corazón, estimula la circulación sanguínea, absorbe los tóxicos del organismo, alivia los resfriados, cura ciertas afecciones del hígado, del estómago y de los intestinos; limpia el tubo digestivo y los intestinos; nutre los músculos, duplica las fuerzas, regula las funciones orgánicas y evita las perturbaciones originadas por la lenta asimilación de los alimentos; en fin, que da un vigor corporal excepcional y prolonga la juventud.
-La miel con infusión de limón es recomendable para combatir desórdenes hepáticos, y como bebida nocturna para evitar la amenaza de un resfriado.
-Los bebés que tienen miel en su dieta, raras veces padecen cólicos. También funciona para evitar que los niños amanezcan mojados por las mañanas, se logrará si se le da al niño una cucharada antes de acostarse.