sábado, 1 de noviembre de 2008

¿QUÉ CONCIENCIA QUIERES PARA TUS HIJOS?




LA DE BUSH Y HITLER O LA DE JESÚS Y LEONARDO DA VINCI.




Las maquinitas de videojuegos (cargados de violencia en su mayoría y muchos de pornografía) y los minicasinos (prohibidos por la ley, operando al amparo de autoridades irresponsables) son los actuales formadores de conducta de niños y jóvenes fuera del hogar y la escuela.






ndividuo tiene niveles de expresión que se desenvuelven en espiral ascendente o descendente. Ejemplos: El pensamiento científico de un Leonardo Da Vinci, un Sócrates, un Federico Nietzsche, un Beethoven, de Simón Bolívar, de Jesús, de Nostradamus, el Buda Gautama Satkiamuni, la Madre Teresa de Calcuta y muchos otros prohombres y mujeres de la historia universal, incluyendo a los contemporáneos, son un claro modelo de lo que es una Conciencia distinta al común de la humanidad. Esas personas tuvieron (tienen) un porcentaje activo de cerebro por encima del promedio para poder transmitir la sabiduría que en su interior cultivan. Vamos a la muestra opuesta: Un criminal que asesina por placer o para robar; un sádico, un Jack "el destripador", un López Sisco, un Posada Carriles, un George W. Bush, un Alberto F.Ravell, un Rafael Poleo, un Hitler, etc., son personas (por darles un nombre) que no tienen ningún porcentaje activo de sus Conciencias, llevan una vida instintiva basada en la satisfacción de sus deseos obscuros y en el puro hedonismo. Son gente que se encuentran psicológicamente en espiral descendente, en barrena y no tienen remedio, no hay forma de invertir el proceso de degradación que sufren pues pasaron el límite de la coordenada meridional. Para que eso les ocurriera (la degeneración) pasaron por eventos sucesivos que pueden haber comenzado desde muy niños, por influencias del entorno familiar y/o circundante, por consumo de alucinógenos o por cualquier otra causa que no es el caso tratar aquí. Los medios de comunicación, lamentablemente, son los encargados, a nivel mundial, de roer la conciencia de la humanidad, de envilecernos, de degenerarnos, de hacernos creer que ellos tienen la pura verdad en sus manos, que sus informaciones son como religión. Esto ya se ha dicho mil veces pero otra cosa es que hagamos conciencia de eso. Es triste y preocupante darnos cuenta de que cada vez más nuestros niños y jóvenes están siendo absorbidos por la tecnología, las famosas "maquinitas" se están adueñando de la voluntad y del tiempo de quienes las juegan.Antes podíamos ver a los niños corriendo, jugando a las escondidillas o echándose una cascarita, ahora los vemos pasar horas frente a una máquina que les regala unas cuantas monedas, o les presenta juegos violentos.Nos quejamos del nivel educativo que tenemos en Tomatlán, pero permítanme decirles que éste cada vez va a ser más bajo, y todo como consecuencia del tiempo que jóvenes y niños le dedican a la televisión y a las maquinitas.Lo más preocupante de todo es que los padres de familia parece que no se han percatado del daño que todos esos juegos están ocasionando en el cerebro de sus hijos, ojalá y que cuando se den cuenta no sea demasiado tarde.Qué diferente sería el futuro de nuestros niños si en lugar de pasar horas frente a las "maquinitas" lo pasaran leyendo, haciendo bien sus tareas o tal vez en actividades como la danza, la música, el teatro, jugando fútbol o en actividades en beneficio de su comunidad.ÿ