Tomatlán recibió con gusto el primer aguacero de esta temporada, ya que le hacía falta a nuestras siembras
y plantas, las calles recibieron una buena lavada, que falta les hacía.
Pero en lugares como el barrio de Dolores el agua no sólo llegó del cielo, sino también del drenaje que se botaba y parecía una fuente, pero de aguas negras, las cuales hicieron corrientes de suciedad y un olor repugnante que seguramente fue a dar a muchos hogares contaminándolos y provocándoles malestar a los vecinos.
Este problema se dio a conocer a las autoridades del trienio pasado, pero sólo lo observaron y jamás lo solucionaron, esperamos que el gobierno actual sí de una solución al problema de drenajes de nuestro pueblo.
y plantas, las calles recibieron una buena lavada, que falta les hacía.
Pero en lugares como el barrio de Dolores el agua no sólo llegó del cielo, sino también del drenaje que se botaba y parecía una fuente, pero de aguas negras, las cuales hicieron corrientes de suciedad y un olor repugnante que seguramente fue a dar a muchos hogares contaminándolos y provocándoles malestar a los vecinos.
Este problema se dio a conocer a las autoridades del trienio pasado, pero sólo lo observaron y jamás lo solucionaron, esperamos que el gobierno actual sí de una solución al problema de drenajes de nuestro pueblo.
